Me despertaba cada día con un nudo en el estómago, y me acostaba cada noche sintiéndome que no había logrado nada. Trataba de seguir adelante, pero era difícil. Sentía que estaba atrapado en un laberinto, y no podía encontrar la salida. Un día, olvidé tomar mis antidepresivos. No fue una decisión premeditada, simplemente lo olvidé. Pero, eso cambió todo. Los primeros días fueron difíciles. Tenía cambios de humor, ataques de pánico, y me sentía muy cansada. Pero poco a poco, empecé a sentirme mejor. Empecé a tener más energía, y empecé a sentirme más feliz. Ahora, llevo un mes sin tomar antidepresivos, y me siento mejor que nunca. Estoy más feliz, más sana, y más productiva. Estoy tan feliz de haber tomado la decisión de dejar de tomar antidepresivos. Si estás luchando contra la depresión, quiero que sepas que no estás solo. Hay muchas personas que han pasado por lo mismo, y hay muchas per...
Anmagousa
Bienvenidos a mi humilde morada.