Continuando con los aprendizajes estoicos, se me cruzó varias veces esta historia proveniente de un antiguo relato sufí, que curiosamente no está relacionada con los orígenes del estoicismo, pero ha funcionando para varias reflexiones contemporáneas de diferentes autores al respecto: Una vez, un rey de un país no muy lejano reunió a los sabios de su corte y les dijo: – «He mandado hacer un precioso anillo con un diamante, con uno de los mejores orfebres de la zona. Quiero guardar, oculto dentro del anillo, algunas palabras que puedan ayudarme en los momentos difíciles. Un mensaje al que yo pueda acudir en momentos de desesperación total. Me gustaría que ese mensaje ayude en el futuro a mis herederos y a los hijos de mis herederos. Tiene que ser pequeño, de tal forma que quepa debajo del diamante de mi anillo». Todos aquellos que escucharon los deseos del rey, eran grandes sabios, eruditos que podían haber e...
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